Este es el ambiente que se vive aquí cada sábado por la mañana, con motivo del mercado. Todo un acontecimiento que explica la vida comercial y cultural que tiene Tolosa a día de hoy.
El mercado se celebra desde el siglo XIII. En su origen, tiene lugar en la Plaza del Ayuntamiento, y ya en 1785, se construye el Tinglado, que lo albergará hasta hoy. Su ubicación no es nada casual. Se encuentra entre los dos caminos más importantes del siglo XVIII: el Camino Real de Castilla, y el que conducía a Navarra por el puente que atraviesa el río. El mercado era parada obligada para el trueque.
El primer Tinglado, que era de madera, se derriba en 1898, y su futura ubicación se somete a votación popular, optando por reconstruirla en el mismo lugar, con hierro fundido y hormigón. Los balcones y las dos torres se añaden en 1927.
En 2006 se acomete su restauración y adopta el aspecto actual. Se instalan varias placas de cristal en el suelo. Encuéntralos y mira a través, donde podrás ver los restos de la muralla medieval. Una muralla que da nombre a este Tinglado en euskera: Zerkausia, cerca-rota.
Desde entonces, el Tinglado no es solo punto de compra-venta del producto local. También es un lugar donde saborearlo. Y es que varias veces al año se convierte en un gran comedor, con la celebración de las fiestas de la Alubia, el Besugo o la Txuleta, carne y brasa, la cual ahora se llama HARAGI. ¿Te imaginas las parrillas, los aromas, el ambiente...? Te invitamos a probarlo, ¡no te arrepentirás!
Sigue el recorrido hasta el siguiente punto de la visita: el puente de Navarra.